Blog de Tina

"Pensamientos y reflexiones de una mente divagada..."

lunes, 27 de julio de 2009

"Te quiero desinteresadamente"



“Seré tu amigo incondicionalmente”

“Siempre estaré ahí cuando me necesites”

“Eres mi mejor amigo”

“Te quiero así tal y como eres; con tus defectos y virtudes”

“Te quiero desinteresadamente”

“Eres un amigo de los de verdad”

“Etc, etc, etc”


¿Cuántas veces nos hemos intercambiado entre amigos estas expresiones tan profundas y capaces de conmovernos en una determinada situación?


Hace un par de días quedaba yo con Ana y en una conversación que tuvimos mientras tomábamos un café me hizo reflexionar profundamente acerca de esta palabra tan aparentemente maravillosa; “Amistad”. Las dos en algún momento de nuestras vidas nos hemos llevado alguna que otra desilusión por culpa de los que creíamos nuestros “mejores amigos” e imagino que como el resto del mundo.


Había algo que no cuadraba en esa palabra. ¿Por qué cuando conocemos a alguien tan especial nos empeñamos en hacer el típico pacto de “te querré desinteresadamente"?


Si algo he aprendido a lo largo de mi vida es que la amistad, tanto como el Amor, son los sentimientos más interesados y egoístas de toda la existencia. Me explico.


Cuando amamos a alguien creemos que lo hacemos desinteresadamente. Pero no nos damos cuenta que en nuestro interior amamos a esa persona por interés, por puro egoísmo y miramiento propio. Necesitamos unos valores que andamos buscando hasta que damos con la persona que nos lo puede ofrecer. Por eso deseamos estar con ella e intentamos retenerla para el resto de nuestra vida. Porque la necesitamos. Ella nos aporta beneficios y satisface nuestras necesidades. Nadie ama desinteresadamente. Somos unos egoístas innatos y no entiendo a veces por qué la mayoría lo niega como si fuese algo malo. “Pase lo que pase, siempre te querré” ¿¿?¿?¿? ¿Y qué ocurre cuando esa persona ya no satisface lo que andas buscando? ¿Por qué negar que somos unos egoístas y que principalmente buscamos satisfacernos antes a nosotros mismos que a los demás? ¿si es tan natural como la vida misma?


He puesto un ejemplo con el amor pero quería basarme en la Amistad. Cuando ofrecemos ayuda a nuestros mejores amigos, ¿realmente lo hacemos por ellos?, ¿o por nosotros?, pensadlo detenidamente. ¿Cómo nos sentimos cuando le ayudamos? Lo hacemos por empatía, puesto que lo que se consigue satisfaciendo el impulso de empatía, es la propia satisfacción, es el alimento de la moral de cada individuo.


La Amistad es puro egoísmo. Siempre esperamos algo a cambio. SIEMPRE. Ya sea por parte de la otra persona o sentirnos bien con nosotros mismos.


Hace años creía en ese concepto ingenuo en que una amistad se debe al amor sin medida, puro y desinteresado. Cuando vas experimentando a lo largo de tu vida nuevas amistades, eres consciente de que todos prometemos al principio y todos actuamos de la misma forma. Y llegas a la conclusión de que todo se basa en el puro interés y egoísmo. Sin egoísmo, no hay amistad ni amor.


“La base del amor a los demás, en sus diferentes variantes, es el amor a uno mismo”.


Ahora me río, cuando alguien te dice que te quiere y te ofrece tu amistad desinteresadamente. ¡Qué ingenuos!, como yo al principio. Como si hacer lo contrario fuese un pecado. Se sienten culpables con tan sólo pensarlo. Y lo que no saben es que es algo innato en el ser humano y natural. Ya lo explicaban muchos filósofos y es cuestión de abrir un poco nuestra mente, meditarlo y aceptarlo nosotros también.


Todos somos egoístas....y así debe ser. Y no olvides que el mejor amigo que puedes tener, eres tú mismo.


ACLARACIÓN: Espero que captéis el transfondo del mensaje. En ningún momento quiero dar a entender que la Amistad no existe o que la amistad no sirva para nada


Un abrazo desinteresado a tod@s!!

1 comentario:

  1. MUY ATINADO EL COMENTARIO, ESTOY VIVIENDO UNA SITUACIÓN DE DESAMOR CON MI MEJOR AMIGA Y AHORA ENTIENDO CLARAMENTE QUE ES LO QUE PASA

    ResponderEliminar